La dictadura de Pedro y Pablo

Cuando te dedicas a tapar mierda ajena, algo de te mierda te va a salpicar. Así que las órdenes de no aceptar ni una queja, ni una reclamación las siguen los funcionarios al pie de la letra, presos y víctimas de su propia servidumbre a la misma oligarquía que pertenecen.
Pedro y Pablo han montado su propia dictadura, una que es más propia de la edad de piedra. Donde en su mundo imaginario las estupideces tienen sentido, robar se llama acción social y la oligarquía se llama progresismo. Vamos, que no hay quien se crea lo que vende esta secta. No es más que la misma muñeca con un vestido distinto. La pregunta es si la Unión Europea va a seguir tapando el chiringuito que tienen montado estos. O de una vez por todas los va a denunciar como lo que son, una panda de sinvergüenzas que tiene al país no solo arruinado sino acojonado. Porque solo cometen delitos los esclavos, la oligarquía es impune a la ley, porque la hace para que la cumplan otros, no ellos, por supuesto. Como todo lo demás, impuestos, etc.
La verdad es que cansa quejarse todos los días, contar una y otra vez la misma historia que se repite desde hace más de 80 años con mismos personajes pero diferentes actores. Pero tampoco es que ellos sean muy originales, nos vienen contando las mismas mentiras y usando los mismos trucos desde siempre. El famoso timo de la estampita en el que siempre se cae. Pague usted los impuestos, que van a ir para su beneficio, mientras nadie se pregunta ¿cuánto de lo que pago yo en impuestos va para mi beneficio de forma directa?. Es decir, si pagar los impuestos es una inversión social en la que aportamos todos una parte, dentro de las posibilidades de cada uno (ja ja ja ja, eso es un chiste claro, porque los que más tiene suelen pagar menos que tontos no son) ¿por qué no podemos elegir a dónde va nuestro dinero?. No podemos decidir que parte del dinero que aportamos, va a educación real, sanidad e  investigación científica real, infraestructuras, etc. ¿No podemos decidir si damos un dinero a algo que funcione y sirva, y dejemos de dárselo o no se lo demos nunca al fondo perdido del cenicero de las colillas?. Pues no, ¿y por qué no? la burocracia podría consultar a cada ciudadano, hoy es más fácil que nunca y sería muy democrático. Lo que ocurre es que ellos se quieren quedar con el dinero, así que te van a contar mentiras, te van a regalar un caramelo para que sonrías y a otra cosa, vente contento y ya está.
Sin embargo la cosa esta muy seria, no se puede tomar a broma que los funcionarios, hayan decidido no hacer su trabajo, y además perjudicar seriamente todo lo que permite al pueblo defender sus derechos. Porque eso quiere decir, que descaradamente hay una guerra entre la oligarquía contra los esclavos. Cada vez que un esclavo quiere quejarse, pues se hacen cosas sencillas como decirle; se ha equivocado de número, le pongo con otro departamento aquí no es, le pongo en espera y luego le cuelgo, tiene que pedir cita para eso pero nunca se la voy a dar, etc, etc, etc. O peor aun las tasas; para hacer esto tiene que rellenar el impreso tal y pagar tal tasa, pero no puede pagarla nada más que en este banco que está cerrado, o a través de esta aplicación  informática que no funciona nunca. Y esto, por mucho que lo quieran tapar se llama DICTADURA.
Están obligando a la gente a hacer lo que ellos quieran porque no pueden hacer otra cosa. Voy a poner un ejemplo sencillo, vamos a imaginar que queremos matricular a nuestro hijo en un colegio cerca de casa, para recogerlo a la vuelta del trabajo, seguimos todos los procedimientos burocráticos en tiempo y forma, todo según nos van exigiendo los funcionarios, y una semana antes de empezar el colegio nos llega una carta en la que nos dice que o bien matriculamos al niño en otro colegio o tenemos que rellenar una serie de impresos y pagar una tasas. Todo esto, antes no existía, se lo han sacado de la manga, y alguien se preguntará ¿por qué? ¿qué razón hay para no dejar que se matricule un niño en un colegio?. Bueno, esto es España aquí todo es posible. Simplemente hay una mafia entre el ayuntamiento y el propio colegio, donde se decide que niños con nombre y apellidos oligárquicos se pueden matricular, y aunque haya plazas libres, siempre hay que dejar unas cuantas no sea que los oligárquicos quieran poner a sus niños aquí en el ultimo momento. Mientras, tu hijo esclavo, que se joda que tendrá que ir un mes más tarde a clase, pagar los libros, rellenar mil papeles, pagar tasas, uniforme que vende solo un centro comercial, y todas las aberraciones y estupideces que la oligarquía llama "estado del bienestar" y realmente se llama "úntate el culo con vaselina".
Entonces ¿qué podemos hacer?, pues justo aprender de ellos, y dar por culo a todas horas a esta gentuza que para eso somos mas. Quejarnos y quejarnos de todas la formas posibles, hasta que los que se cansen sean ellos y se dediquen a la apicultura o a podar bonsais.