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jueves, 1 de noviembre de 2018

En contra de los que más quieres

Antes se echaba la culpa a la adolescencia, ese egocentrismo, esa manera de mirar a tu propia familia y amigos por encima del hombre de la noche a la mañana, dando lecciones a todo el mundo, diciendo como tienen o no tienen que hacer las cosas. Creyéndose seres superiores de divino conocimiento, rodeados injustamente de una panda de ineptos totales. Hasta que te dabas un buen golpe de realidad, y tenía que volver a casa llorando y reconociendo lo imbécil que eres.
Sin embargo como hoy por hoy se es adolescente hasta los 50 años y más, que alguno tendrá el récord de ser el imbécil de mayor edad del mundo, pues no nos damos cuenta de que realmente es un lavado de cerebro que solo nos perjudica a nosotros mismos.
En tu casa gritas a quien pillas, tratas de inútiles e incompetentes. Pero en tu trabajo todo eso que te molesta en casa, esas leyes que te inventas, esa moral y ética tan estricta que impones al resto, no existe. En el trabajo te comportas como lame culos, que haces lo que te dicen y encima sonríes. La locura mayor de tu jefe para ti se convierte en una idea genial que hay que seguir y apoyar, por absurda que sea para el resto del universo. Tu jefe un día llega al trabajo y dice "a partir de hoy, trabajaremos sentados en las sillas, pero estas estarán no apoyadas en el suelo junto al escritorio, sino encima de él". Y tu oyes esa mierda, y ni razonas, aplaudes, vitoreas, subes tu silla y la de tu compañero. Fuera del trabajo les comentas a tus amigos "mi jefe a tenido una idea genial, innovadora y creativa", llegas a casa y obligas a tus hijos a estudiar en esas condiciones, etc, etc, etc.
Puede que el lector no se vea reflejado, y vea muy claramente a un compañero suyo, llamado comúnmente "trepa" pero ¿se puede estar seguro de que muchos conflictos en el hogar se podrían solucionar si no aguantáramos muchas cosas en el trabajo que no debemos tolerar?. A lo mejor, muchos de las amistades y matrimonios rotos llegan porque uno o ambos miembros de la discusión tienen un lavado de cerebro tal, que les es imposible razonar.
¿Y como estar en el trabajo a gusto y no llevarse disgustos en casa?. Yo recomiendo eso pensar, que suele ser muy práctico. Si te enfadas por una cosa muy tonta en casa pregúntate por qué y cálmate, porque la mayoría de las veces la discusión no tiene sentido. Si te enfadas en el trabajo, mira a tu alrededor y pregúntate si ese es tu sitio, porque puede que no. Si sientes en el trabajo que todo lo hacen mal que nada funciona, que tu lo harías mucho mejor, limítate ha hacer tu parte la mejor posible, si alguien te pide ayuda, dásela, pero no impongas nada a nadie, porque tu forma de trabajar es solo posible si la haces tu, y nadie más, acéptalo de una vez. También acepta que cada uno tiene el derecho de hacer su trabajo como considere oportuno, igual que no te gusta que nadie esté encima tuyo diciendo que lo haces mal que es de otra manera, cuando el resultado final, es exactamente el mismo, tanto de un modo como del otro. Por supuesto no eres tu jefe, no intentes copiar o imitar su vida o su forma de pensar, él hace un papel en horas laborables que posiblemente no tenga nada que ver con lo que hace o como se comporta en casa.
Voy a poner un ejemplo real que conozco. Un muchacho de unos veinte años, trabaja en una peluquería de lujo. Los clientes de la peluquería llegan en coches de alta gama que el muchacho no puede comprarse sino en muchísimos años con su sueldo. Pero al poco de trabajar allí, se las apaña para tener coches en apariencia mejores que muchos de los clientes. El lado positivo es que el muchacho pase de ser peluquero a vendedor de coches. El lado negativo es que necesitaba ser alguien que no es. Cuando alguien quiere ser quien no es, puede terminar comportándose como quien no es. Y si los que están por encima de ti son unos locos, psicópatas e inútiles, como por ejemplo, la mayoría de los altos cargos de la administración pública, pues como se dice "vas de culo, y cuesta bajo".
Cuesta mucho esfuerzo ser otra persona, ¿por qué no te relajas y eres tu mismo?.

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