Translate

martes, 8 de enero de 2019

Espías, alcahuetes y la red clientelar

No se hubiera mantenido ni se podría entender el régimen oligárquico sin la red de espías bien organizada y estructurada existente hasta hoy en España. Todos ellos herederos del régimen y habiendo sido beneficiarios directos del asesinato y robo de sus convecinos. Es de todos conocido que se premiaba con licencias de estanco, farmacia y taxi a los servidores de segundo rango, como se premiaba y se premia aun con puestos de funcionario a los de primera categoría dentro del sistema. Lo que no he escrito hasta hoy es cómo identifica a un espía de la oligarquía. Así que voy a intentar hacerlo. Los espías que pueden decir ser de un bando u otro con la sola intención de sacar información. Dan la apariencia de amigos fieles, simpáticos y atentos, pero jamás se comportarán como tales, pues su único objetivo es obtener información. Algunos siguen usando los viejos métodos de ir a la iglesia y al bar para conseguirla, estos suelen declararse de la derecha franquista, pero sin embargo su vida dista mucho de dar ejemplo de nada, y acaban haciéndose con una pensión por invalidez o similar que les haga cobrar del estado sin trabajar. Sino la pueden cobrar directamente, harán que uno de sus hijos la cobre, y no dudarán en destruir al completo la vida de sus vástagos para hacerlo. Otros, que en apariencia se presentan como de la extrema izquierda, pero que igualmente son espías acérrimos de la oligarquía, te visitan solo con la intención de saber cuanto sabes de lo que realmente está pasando y si estás o no suficientemente manipulado por los medios de comunicación. La idea es saber que sabes y hasta donde sabes, y si el lavado de cerebro social está haciendo efecto en ti lo suficiente. Para reconocerlos simplemente hay que pensar que no se dan duros a peseta, que nadie se hace amigo tuyo de la noche a la mañana y que tampoco suele ser normal que alguien hable de ti maravillas sin que te conozca de nada. Son esos que siempre recurren al peloteo, y a poner verde a tus supuestos enemigos, con la intención de aparentar saber más de ti de lo que en realidad saben y usar eso en tu contra. Mucha gente los identificará con esos "compañeros" de trabajo que por delante te ponen buena cara y parecen tus más fieles aliados y a tus espaldas descubres que te ponía verde hablando con el jefe culpándote de sus cagadas para que si tienen que echar a alguien sea a ti.
Hay quien dice que el enemigo hay que tenerlo cerca para saber sus movimientos. En este caso es un error, cuanto mas lejos y menos sepa de ti mejor. Siempre se inventará cosas, pero al menos no le das motivo para que lo haga. Porque te tomas un café, se sienta a tu lado, y luego dice que le has contado que mataste a tus hijos y que te pinchas heroína, que la imaginación de un espía cotilla es infinita y siempre con la única intención de hacerte cuanto más daño, mejor.

No hay comentarios: