El juego económico

¿Cómo funciona la economía para que un niño lo entienda?. Vamos a poner que los que tienen el poder económico, que son el 1% de la población mundial, son las letras  mayúsculas A, B y C. Y el resto de la población son las letras minúsculas. A, B y C, son amigos y/o familiares. A trabaja de funcionario, y coloca a sus pequeños bastardos de funcionarios, pero además, A que está financiado por el banco de B, que a su vez financia la empresa multinacional de C. A, con el dinero público de los ciudadanos solo compra a C. B solo invierte en bolsa para que gane C. C da dinero y regalos al funcionario A. B da ventajas e información privilegiada a A. A da información privilegiada a B, y cubre sus deudas o delitos. Pero A, también cubre los delitos de C y retoca las leyes para beneficiar a C, perjudicando a las letras minúsculas. Las letras minúsculas pueden trabajar como peones de A, B o C. Pero las letras minúsculas aunque cobren un salario de A, B o C, deben devolver íntegramente su sueldo a A, B o C. Para ello A se ha inventado con ayuda de B y C, un plan estupendo.

C contrata a la mayoría de las letras minúsculas, que se gastan todo su dinero en C. El poco que les queda, lo invierten en propiedades que son de B, y que B les presta dinero para poder pagarlas porque el sueldo que da C, no es suficiente. Así que las letras minúsculas dan casi todo su dinero a C y B. Pero algo les queda, aunque poco. Ese poco, viene A, y lo convierte en impuestos, que está claro que terminaran en manos de B y C. De esta forma tenemos un ciclo económico donde A, B y C cada vez están más gordos y tienen más dinero y poder, y las letras minúsculas cada vez pasan más hambre y penas. 

Las letras minúsculas sueñan con tener que pagar menos a B y A, y que C les suba el sueldo. O bien, tener un contrato mejor, y ser parte del funcionariado, siendo un esclavo de A. Su sueño, es tener mucho dinero, para poder pagar la deuda que tienen con B y comprar más cosas a C. Sin embargo, más que sueño es una pesadilla, porque cuanto más dinero den a C, más dinero tienen A y B, y a su vez, menos tendrán las letras minúsculas. 

Algunas letras minúsculas quieren ser como C, y montan su empresa, pero ni B ni A dejan que esta prospere, y salen con más deuda con B, y teniendo que volver a trabajar para C. 

Otras letras minúsculas deciden trabajar para B, pero les ciega el ver tanto dinero moverse por el banco, así que gastan todo su dinero y se endeudan con B y con C, más aun que las letras minúsculas que trabajan para C. 

Muy pocas letras minúsculas pueden trabajar para A, que es un trabajo con un sueldo bajo pero estable. Trabajar para A, crea una gran depresión, porque no motiva a las letras minúsculas el tener un trabajo repetitivo que no valora ni el esfuerzo ni las habilidades personales. Así que también los que trabajan para A se endeudan con B más que los que trabajan para C, y por supuesto, son los mejores compradores de C, porque compran de forma enfermiza y compulsiva. 

Esto se puede ver en un dibujo como este: 

Al ver este dibujo, el niño se preguntará varias cosas. La primera es por que unas lineas son más gruesas que otras. La respuesta es que las lineas finas indican poco flujo de dinero, mientras que las gruesas indican grandes cantidades de dinero en movimiento. Y luego, nos dirá, si la mayoría del dinero sale de las letras minúsculas, y se mueve entre las letras mayúsculas ¿las letras minúsculas se quedarán sin dinero?. Pues SÍ, las letras minúsculas acabarán como un conjunto vacío, porque financian a las letras mayúsculas con su trabajo sin ellas mismas darse cuenta. El pequeño puede preguntar ¿y por qué no dejan de dar su dinero las minúsculas a las mayúsculas?. La minúsculas están obligadas a dárselo a A, y se han endeudado con B, pero a C se lo pueden dar o no, sin embargo son adictas a comprar a C, ya no saben comprar a otras letras minúsculas. 

Y por último el niño, puede preguntar. ¿Y por qué no se hace que no se le deba tanto a B, no se le pague tanto a A, y no se compre tanto a C?. La respuesta es que mientras las letras minúsculas permitan que haya flujo de dinero entre las mayúsculas, las minúsculas no pueden hacer que eso cambie. 

Por tanto, no podemos eludir nuestra culpa en las crisis económicas, porque nosotros, el 99% de la población, esas letras minúsculas, estamos financiando el poder de las mayúsculas, y lo hacemos como borregos, sin pensar, todos los días.