Un mundo de mentiras

¿Por qué mentimos?. Realmente no tengo ni idea de porqué se miente tanto, a mi personalmente me parece un absurdo, sobre todo mentir en cosas que la realidad demuestra con firmeza lo contrario. Pero si estamos acostumbrados a las mentiras de las grandes corporaciones, de los gobiernos o de los bancos, es normal que otras mentiras ni si quiera nos llamen la atención. Sin embargo, a mi sí me llaman la atención y mucho. Porque puede que sean el reflejo de algo, algo que puede ser un grave problema social que de momento no nos interese, pero que en un futuro muy próximo sí lo haga.
Las mentiras e Internet se llevan de la mano. ¿Quién no ha mentido a la hora de poner sus datos personales?, eso es hasta lícito hacerlo. Sin embargo, existen personas que todo lo que crean sobre sí mismas es una mentira, tan grande, que pretenden continuar fuera del circo que ellos mismos se han montado. Y es algo totalmente absurdo, porque por ejemplo. Pongamos la mujer que se hace pasar por intelectual, bonita, que es amante de los animales y comprometida con la sociedad. Y en realidad, al conocerla es una amargada, que le da lo mismo todo, salvo ella claro, que de bonita poco, y que lo único que pretende con el circo que ha creado es que su ego aumente, y que la falta de reconocimiento en la vida real, se la den en la vida virtual. Lo cual, aunque ella no lo sepa, en ninguno de los dos casos es reconocida en absoluto, pues solo el esfuerzo, el trabajo, y lo que realmente somos, puede conseguir eso.
En el género masculino, es aun peor, debe ser porque el EGO siempre se asocia más a hombres que a mujeres, aunque hoy por hoy, eso ha cambiado radicalmente. Podemos encontrarnos a un gandul que no ha hecho nada en su vida, ni si quiera por si mismo, y que dice todo lo contrario en la red. Físicamente un hombre obeso, dejado totalmente, con solo los conocimientos que saca leyendo lo que sea en la red, al mismo tiempo que se comunica contigo. Claro, sabe de todo, y si no se lo inventa. Porque es muy rápido en la búsqueda de información para conseguir engañar a otros. Sin embargo, se les caza igual, porque un gandul que nunca a salido de su casa, absolutamente para nada, y que ha tenido todo hecho siempre, resulta fácil de pillar aunque copie y pegue las experiencias de otros. Lo peor, es que no se ve defectos, no se ve como es en realidad. Se mira en el espejo y ve un héroe de comic, fuerte, corpulento, valiente, vamos, todo lo contrario de lo que es él en realidad. Puede seguirte la corriente y cambiar de idea solo por agradarte y que continúes hablando con él, pero es tan tonto eso. Si no tienes personalidad, cuando la otra persona si la tiene, aburres inmediatamente, te cazan muy fácilmente. Así que ¿por qué siguen mintiendo?. Yo tengo la teoría que se encuentran entre ellos, los mentirosos se acaban encontrando. La mujer fea y dejada, con el hombre horroroso y gandul, viven su romance en la red. Él se cree que es Richard Gere, ella se cree que es Pamela Andersón y los dos felices en su mentira. Realmente, eso a mi no me preocuparía ni lo más mínimo porque en teoría no harían mal a nadie, ¿o sí?. Pues sí, hacen bastante daño. Son personas que tienen la necesidad imperiosa y adictiva de alimentar su frustración y su ego, y para ello buscan camorra constantemente. No quieren la aprobación, quieren ser Julio Cesar y Cleopatra. Y si alguien está por medio, no dudan en usar todos los medios para que sea echado a los leones.
Por tanto, volvemos a tener el tan traído y llevado, comportamiento psicopático. Esta vez, es a raíz de una adicción a alimentar su propio ego. Ya que como buen inútil no es posible que lo alimente de una forma sana. No le pidas que coja un gato de la calle enfermo y le dé de comer. Ni siquiera aunque tenga un bocadillo de jamón y le sobre la mitad, lo tirará a la basura, mientras el gato le llora pidiendo un trozo. Pero luego se hará el abanderado de la ayuda a los animales, y pondrá mil fotos sobre gatitos lindos. ¿No es esto una locura total?. Lo peor es que al resto nos entra la desidia, son tantos seres infrahumanos como estos los que inundan la sociedad, que al final si ves al gato (sano) paseando por el parque (donde seguro algo encuentra para comer y dormir caliente) le miras diciendo, "corre pequeño, se libre, y no dejes que te cace un gilipollas para alimentar su ego".