Antes cuando se realizaba una huelga, el país se paralizaba. Esto era debido a que gran número de ciudadanos tenían negocios familiares, y claro está el parar el país suponía una gran perdida económica para el gobierno y eso no podía ser. Por eso lo gobiernos respondían a la ciudadanía y hacían caso de sus quejas. Ahora no se paralizan nunca los países. Porque seguimos comprando, seguimos consumiendo. Como hemos cambiado nuestras costumbres de consumo, cuando hay una huelga seguimos consumiendo. Aunque solo sea que utilizaremos el móvil o Internet, pero seguiremos moviendo dinero. Por eso las huelgas, las manifestaciones, solo sirven para etiquetar a los subversivos y no resuelven nada. Para provocar un cambio real en la sociedad hay que perjudicar a aquellos que provocan el daño, si no les afecta nada lo que hacemos no tienen ningún motivo para hacer nada diferente a lo que hacen.
Así que si quieres cambiar algo injusto por algo justo, lo que tienes que hacer es devolverle la patada a el que produce la injusticia, y no hay otra forma. Yo no soy una persona violenta, pero creo que donde más les puede doler siempre es en el bolsillo, y después dejar a las claras que su vida privada apesta.
Es importante recordar que son peleles, y que no tienen más fuerza que la impunidad que nosotros mismos les damos. Demostrar la escasa calidad humana de estos seres es vital, no solo con pruebas de que son corruptos y delincuentes, siempre tienen algo mucho más oscuro y criminal que esconder y que si se descubre nadie podrá librarles de la cárcel.
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